Defensoría del Pueblo convoca al Estado a fortalecer planes de prevención de violencia contra niñas, niños y adolescentes desde la mirada de los actores

En los últimos meses, los hechos referidos a la violencia que involucran a niñas, niños y adolescentes dentro de los espacios educativos causaron consternación nacional y ha convocado a diferentes instancias del Estado y la población a impulsar acciones urgentes para frenar este flagelo social.

La Defensoría del Pueblo viene trabajando con los actores, en encuentros departamentales, escuchando sus preocupaciones y ateniendo sus denuncias. En mayo, en las mesas departamentales "Voces Unidas Frente a la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes”, más de 60 organizaciones civiles e instituciones públicas identificaron como prácticas recurrentes a la violencia entre pares, agresiones físicas, bullying, violencia sexual, entre otras.

Producto de la actividad nacional, emergieron diez recomendaciones que posteriormente, el 29 de mayo, la Defensoría del Pueblo entregó a al gobierno nacional como insumos para el fortalecimiento en los planes de prevención de violencia desde la mirada de los actores.

De las 16.275 unidades educativas que funcionan en el país, sólo 7.336 cuentan con planes de convivencia pacífica y armónica, 3.425 están en proceso de construcción de su plan y 5.514 unidades educativas, no tienen plan de convivencia pacífica y armónica.

En ese contexto, la Defensoría del Pueblo insta al Estado a construir y aprobar planes integrales de convivencia pacífica y armónica que promuevan un entorno seguro, los mismos, deben estar normados y protocolizados, además deben contener estrategias que fomenten el respeto mutuo, la resolución pacífica de conflictos y la prevención de la violencia. Los planes que funcionan en 7.336 unidades educativas, deben ser socializados y aplicados adecuadamente, según el contexto social.

Se encomienda la actualización del ‘Protocolo de prevención, actuación y denuncia en casos de violencia física, psicológica y sexual’, así como de las rutas correspondientes y deben adecuarse a la normativa vigente y reflejar las nuevas formas de violencia, como el cyberbullying, sexting y el grooming, además de las medidas de protección.

El Ministerio de Educación debe priorizar también la implementación del ‘Protocolo de violencia entre pares’, a fin de proporcionar herramientas y mecanismos para abordar este tipo de violencias, garantizando la seguridad de los estudiantes, la prevención de la violencia, la sensibilización en la comunidad educativa, el apoyo a las víctimas y la promoción de la convivencia pacífica.

Es urgente que los programas de prevención a implementarse, deben estar basados en evidencia científica que aborden los factores de riesgo de los diferentes tipos de violencias más recurrentes, para garantizar la efectividad de las intervenciones y reducir la réplica de las violencias.

Mejorar la protección de las niñas, niños y adolescentes en los entornos educativos requiere el compromiso de todas y todos para crear ambientes armoniosos que promuevan su desarrollo integral. Es responsabilidad del Estado brindar protección al "recurso humano" que representa la niñez y la adolescencia, asegurando así la creación de espacios de convivencia pacífica que servirán de legado para las generaciones futuras.

29 de junio de 2023