DEFENSORÍA DEL PUEBLO EXIGE AL GOBIERNO A ASEGURAR MEDIDAS EN FAVOR DE SECTORES EN SITUACIÓN DE POBREZA Y VULNERABILIDAD ANTE UNA EVENTUAL CUARENTENA NACIONAL
20 de Marzo de 2020 12:00 am
Ante el pedido de algunos sectores de que se dicte la declaratoria de una cuarentena nacional, la Defensoría del Pueblo, en caso de asumirse esa medida, exige al Gobierno a tomar previsiones y acuerdos para garantizar, mínimamente, la alimentación y los servicios básicos de los sectores en situación de pobreza y vulnerabilidad, que son los que adquieren su sustento día a día; el no hacerlo implicaría vulnerar el derecho a la alimentación y las mínimas condiciones de vida.
“Corresponde tomar en cuenta e
idear medidas de subsidios en especie a favor de los sectores de la población que
subsisten del comercio informal como un refuerzo asistencial que permita a la
ciudadanía en situaciones económicas desfavorables contar con el alimento
necesario; en línea con los expertos en derechos humanos de las Naciones Unidas
y del sistema regional, alertamos al Gobierno que cualquier medida que asuma
para frenar el avance del coronavirus debe considerar y respetar los derechos
humanos de la ciudadanía, en especial de los grupos en situación de
vulnerabilidad y económicamente deprimidos”, manifestó la máxima autoridad de
la institución, Nadia Cruz.
La Autoridad, además, pidió al Órgano Ejecutivo garantizar,
inmediatamente, medidas específicas de protección y prevención en favor de los
grupos en situación de vulnerabilidad, sin escudarse en límites competenciales,
toda vez que los mismos solo resultan perjudiciales para la población
beneficiada a quién el Estado le debe protección.
De igual manera, señaló que la declaratoria descontextualizada de una
cuarentena podría generar inflación, afectación a los pequeños productores, endeudamiento
de algunos sectores y acrecentar la conflictividad social; observó, además, el
latente riesgo del uso excesivo de la fuerza ante una politización y
estigmatización contra quienes observen dicha medida, por lo cual, dijo, es imprescindible
que el Gobierno transitorio se abstenga de discursos y acusaciones que tiendan
a politizar las demandas y reclamos de los sectores.
La Defensoría del Pueblo advirtió que el Decreto Supremo 4196,
referido a la declaratoria de emergencia sanitaria nacional, incurre en
ambigüedades e incoherencias normativas y no especifica los tipos penales para
sancionar a las personas que incumplan sus preceptos, lo que podría provocar
afectación de los derechos humanos por la aplicación discrecional de la
detención preventiva como mecanismo estatal de respuesta, sin considerar que no
existe ni ambientes adecuados en este momento de emergencia para ese cometido,
en criterios de salud pública. A esto se suma que en algunos casos se amonesta
a los que incumplen la disposición y, en otros, se los arresta o que las sanciones
varían de lugar a lugar.
Cruz, asimismo, expresó temor ante el hecho de que la enfermedad siga
con su propagación de forma rápida y se produzca un colapso en los hospitales
públicos del país y el acceso a la salud se vea afectado en desmedro de la población
en general, por lo cual urge fortalecer los protocolos de bioseguridad para el
personal de salud en todos sus niveles. En ese contexto, recordó que la Defensoría
del Pueblo, desde hace varias gestiones, realizó observaciones al sistema de
salud, a la provisión de medicamentos e insumos en hospitales públicos y de
seguridad social, y a las constantes interrupciones en el servicio en desmedro
de la población en general; falencias que podrían desembocar en una afectación
al personal de salud que atiende a enfermos con el Covid-19, por la falta de
equipos de bioseguridad.
La Autoridad defensorial manifestó, también, que se evidencia con suma
preocupación que en el actual contexto sanitario y social, el Estado no está
asumiendo medidas que eviten la propagación de la enfermedad en el área rural,
pues conforme a reportes obtenidos por las Delegaciones Departamentales y
Coordinaciones Regionales de la Defensoría del Pueblo, se observa la poca
información remitida a los sectores de zonas alejadas en su idioma nativo.
Por ello, remarcó, el Estado en este tipo de contextos de emergencia
debe remitir información oficial y directa a estos sectores a efecto de
comunicar cuál es el peligro de la enfermedad; medidas que se deben asumir para
evitar el contagio y la propagación e información relacionada a la conducta de
las personas en caso de indicios de contagio; cuáles son los síntomas y qué
hacer ante la sospecha; a lo que se recomienda adecuar la información a la
realidad de cada uno de estos pueblos y zonas rurales.
“Lastimosamente las medidas de prevención de ingreso de la enfermedad
a Bolivia, o su eventual control rápido, fueron insuficientes por parte del
Gobierno; la Defensoría del Pueblo ha evidenciado que el control de personas
que llegaron a territorio nacional, tanto a terminales terrestres como aéreas,
fue prácticamente nulo. La dilatoria toma de decisiones sobre la enfermedad
viene acompañada con la falta de previsiones sanitarias, tanto el nivel central
como los niveles sub nacionales esperaron contar con casos de personas contagiadas
para desarrollar planes y estrategias de control de la enfermedad”, manifestó.
Urge, añadió, que el Gobierno se preocupe integralmente y no con medidas aisladas, de manera tal que efectúe
una programación inmediata para la aplicación de retrovirales, su
abastecimiento y dotación estatal así como la gestión a nivel
internacional con carácter de urgencia
para la pronta culminación de investigaciones para su vacuna.