DEFENSORÍA DEL PUEBLO INVOCA AL ESTADO ARTICULAR Y COORDINAR ACCIONES PARA SOFOCAR OPORTUNAMENTE LOS INCENDIOS FORESTALES
06 de Junio de 2024 12:26 pm
En los últimos cuatro años, las y los
bolivianos hemos presenciado de forma recurrente el incremento de incendios
forestales que derivaron en la vulneración de derechos humanos como el derecho
a un medio ambiente sano, así como el agua (recursos hídricos), sistemas de
vida, biodiversidad, sistemas productivos, seguridad y soberanía alimentaria.
En la actualidad, debido a la temporada de quemas
agrícolas o 'chaqueos', se advirtió un mal manejo de esos fuegos que
desencadenaron en incendios forestales en regiones de Santa Cruz, Beni,
Chuquisaca, Cochabamba y La Paz, con afectación directa del hábitat donde viven
las familias indígenas originarias y campesinas en alta situación de
vulnerabilidad, así también la pérdida de la biodiversidad, la afectación a
zonas de recarga hídrica y ecosistemas frágiles. El impacto de este daño al
medio ambiente tiene funestas consecuencias económicas y sociales en miles de
familias que habitan en el sector y alrededores.
De acuerdo a información del
Ministerio de Medio Ambiente y Agua en la gestión 2023, ascendió a 216.640
hectáreas en Áreas Protegidas, de las cuales, el Territorio Indígena y Parque
Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS), es el que tuvo mayor superficie quemada con
un registro de 95.502 hectáreas. Hasta el 5 de junio, según el Sistema de Información y Monitoreo
de Bosques se registró la presencia de 2.645 quemas e incendios forestales, y
3.577 focos de calor.
En ese contexto, la Defensoría
del Pueblo identificó la
vulneración de los siguientes derechos de la Madre Tierra: a la vida; a la
diversidad de la vida; al agua; al aire limpio: al equilibro; a la
restauración; y a vivir libre de contaminación establecidos en las Leyes N° 071
y N°300.
Ante este preocupante panorama, la Defensoría del Pueblo invoca a los
diferentes niveles del Estado a que, en coordinación con la sociedad civil,
puedan desarrollar acciones conjuntas de prevención de focos de calor e
incendios forestales que deriven en una optimización de los recursos
económicos para salvaguardar a las familias indígenas originaria campesinas que
habitan en armonía con la Madre Tierra y mitigar la afectación en lo social
y familiar, así como la protección de los sistemas de vida y biodiversidad para
que realicen sus funciones ecológicas y ambientales.
La protección de la Madre Tierra, al igual que
la defensa de los DDHH es una opción de vida que la Defensoría del Pueblo
promueve en todos los ámbitos y, esta causa común, convoca a las y los
bolivianos a trabajar juntos para evitar que se repitan los lamentables
acontecimientos que nos empuja a la “carretera hacia el infierno climático” tal
como advierte la ONU.
La Madre Tierra en cada
incendio clama vida
¡No quemes!
La Paz, 06 de junio de 2024