DÍA MUNDIAL DE LUCHA CONTRA EL SIDA

La Defensoría del Pueblo, al recordar el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, que se conmemora cada 1 de diciembre, reafirma su compromiso de trabajar por las personas que viven con el VIH y garantizar el cumplimiento de sus derechos; en ese marco se suma al apoyo a todas y todos los involucrados en la lucha contra este virus y a mejorar la comprensión de que el VIH es un problema de salud pública mundial, lo cual promueve las Naciones Unidas a través del lema #HablaConmigoAbiertamente.

Esta población está amparada por la Constitución Política del Estado que establece que todas las personas tienen derecho a la salud y que el Estado debe garantizar la inclusión y el acceso a la salud de todas las personas, sin exclusión ni discriminación alguna; asimismo, la Ley 3729, de 8 agosto de 2007, garantiza los derechos y deberes de las personas que viven con el VIH-Sida, así como del personal de salud y de la población en general; establece además, políticas y ejecuta programas para la prevención, atención y rehabilitación del VIH-Sida y la protección de los derechos de quienes lo portan.

 

Las personas que viven con el VIH-Sida tienen derecho a la reserva de su identidad y situación, para ello las autoridades judiciales se encuentran obligadas al resguardo de su identidad, en todas las instancias del proceso; para este efecto se debe utilizar un código o nomenclatura codificada, salvo petición y consentimiento de la persona afectada.

 

No obstante, se observa que aún existe manifestaciones de estigmatización y discriminación hacia esta población, aspectos que son una de las principales barreras para el acceso universal de la prevención, tratamiento, atención y apoyo a las personas portadoras del VIH o Sida y se constituyen en una violación a la dignidad y a los derechos humanos, ya que limita el acceso a la igualdad y a la justicia social.

 

La Defensoría del Pueblo en los tres primeros trimestres ha atendido 13 casos de vulneración de derechos hacia esta población, en Cochabamba, Potosí, Yacuiba, El Alto y Chuquisaca, relacionados a la confidencialidad, atención en salud, discriminación, afectación a niña o niño de madre que vive con VIH, derecho al trabajo y dignidad.

 

A la fecha, la institución trabaja en un informe respecto al servicio y tratamiento que se brinda a las personas que viven con VIH-Sida, a fin de evidenciar el cumplimiento de la prestación de servicios de salud respecto a las condiciones de infraestructura, equipos, almacenamiento de  materiales, personal, privacidad y suministro gratuito de los antirretrovirales en los establecimientos de salud, Centros Departamentales de Vigilancia y Referencia (CDVIR) o Centros Regionales de Vigilancia y Referencia (CRVIR) que dispensan estos medicamentos, para lo cual se desarrollaron verificaciones defensoriales en 22 establecimientos de salud a nivel nacional.

 

En Bolivia el primer caso de VIH fue reportado en 1984 en la ciudad de Santa Cruz, cuatro años después de ser descubierto en Estados Unidos; según el Programa Nacional de VIH/Sida del Ministerio de Salud, desde 1984 hasta diciembre de 2018, Bolivia registró 23.898 casos notificados, de los cuales 19.839 son por VIH y 4.059 por sida, siendo los departamentos de Santa Cruz (10.858), La Paz (5.165) y Cochabamba (4.543), en los que se tiene un número mayor de casos de VIH.

 

Si bien ha habido progresos en cuanto a la respuesta al VIH en la región de las Américas, estos esfuerzos deben continuar y fortalecerse si queremos terminar con el este virus hasta 2030. Según las Naciones Unidas, en América Latina las nuevas infecciones por VIH han aumentado en un 7% desde 2010. Se estima que 100.000 personas contrajeron el VIH solo en 2018 y uno de cada cinco eran jóvenes de entre 15 y 24 años.